Espacios. Vol. 18 (2) 1997

El componente tecnológico de la competitividad industrial: Un reto de la empresa y de los centros de investigación y desarrollo

The technological component of the industrial cmpetitiveness: A challemge of companies an R&D centers

Benito Sánchez 1, María A. Cervilla 2, Paúl Esqueda 3 y Angel Díaz 4


RESUMEN

El objetivo de este trabajo, en primera instancia, es presentar los resultados del diagnóstico del desempeño competitivo de un grupo de empresas suplidoras de la industria petrolera utilizando indicadores de desempeño estandarizados a nivel internacional. Estos indicadores revelan una situación de debilidad mayoritariamente en las áreas relacionadas con tecnología de producto y tecnología de proceso. Esta información es de vital importancia, no solo para las empresas, sino para las instituciones de apoyo del Estado, tales como los centros de investigación y desarrollo, que tienen como fin apoyar la competitividad global de las empresas. De allí surge el segundo objetivo de este trabajo, que es poner en evidencia el lenguaje (o los indicadores) con el cual las empresas se evalúan y el cual debe ser interpretado o traducido por los centros de I&D como la demanda, las oportunidades de negocio o su verdadero mercado. Un estudio de competitividad de un sector industrial puede ser interpretado como un estudio de mercado para un centro de I&D.

ABSTRACT

The main objective of this paper, in the first place, is to present the results of a survey on competitive performance of a group of companies, who are providers of goods and services of the venezuelan oil industry. The performance measures used, which are international standards, reveal that most of the weaknesses are concentrated in the areas of product and process technology. This is information of vital importance not only for the companies involved but also for the state owned organizations that support global industrial competitiveness, such as government R&D laboratories. This gives rise to the second objective of this paper, which is to show the language or performance measures that companies use to evaluate themselves, that must be interpreted or translated by the R&D centers as their demand, business opportunities or their market. A competitiveness study of an industrial sector must be interpreted as market study for a research center since technology is the key issue.

Contenido


Introducción

El desarrollo de capacidades competitivas de clase mundial es una preocupación latente tanto para los países industrializados como para los países en desarrollo. Los enfoques más recientes proponen a la innovación y al cambio técnico en las empresas como un determinante clave de la competitividad internacional (Lundvall, 1988). En este contexto, la competitividad es definida como el resultado de un proceso continuo de innovación que hace a las firmas capaces de alcanzarla y mantenerla a medida que la tecnología y el modo de competir cambian.

Así, la innovación llega a ser un proceso dinámico donde las empresas, a través de sus individuos, de los vínculos interorganizacionales y de la formación de redes y alianzas estratégicas, toman nuevas iniciativas que explotan la base de conocimiento de la economía. La innovación también se define como el proceso por el cual las firmas alcanzan e implementan el diseño y la producción de bienes y servicios que son nuevos para ellas, independientemente de si son o no nuevos para sus competidores 5.

En el nuevo entorno, ser competitivo es: "llegar al mercado logrando captar, mantener y ampliar el espacio que la empresa ocupa con sus productos y servicios; es producir con alta calidad y alta productividad; es saber complacer a los clientes y, esencialmente, ser un generador de riqueza" (Pérez, 1994: 15). La cada vez más rápida obsolescencia de los procesos y productos que caracteriza al escenario competitivo actual y el peso creciente que los bienes diferenciados están ocupando en el comercio internacional, han extendido la idea de que la innovación tecnológica es la llave maestra del éxito de las firmas industriales (López y Lugones, 1996).

Para ser competitivo en un mercado global es necesario poseer, por una parte, fortalezas que permitan a las empresas entrar en el mercado -calificadores o qualifying- y, por otra, aquéllas que las hagan ganar ordenes - ganadores o order-winning- 6. Dentro de los atributos típicos, que pueden ser calificadores o ganadores dependiendo del mercado, se encuentran: tiempo de entrega, confiabilidad en tiempo de entrega, flexibilidad tanto en productos como producción, calidad y confiabilidad del producto, precio, entre otros. Así, la competitividad se desarrolla sobre múltiples terrenos y "el precio es sólo uno de los elementos importantes; la calidad, los servicios, la entrega oportuna y la adaptación a los diferentes tipos de usuarios son factores que cobran importancia creciente para captar y mantener mercados" (Pérez, 1991: 9). Para ello la empresa requiere, además de un equipamiento adecuado, poseer dominio tecnológico, conocimiento del mercado, disponibilidad y manejo de información actualizada y personal calificado y motivado. Es decir, la empresa debe haber adquirido y desarrollado capacidades tecnológicas.

Una empresa no necesariamente será competitiva porque haya adquirido la tecnología de proceso más novedosa. La tecnología se refiere a "las actividades relacionadas con la solución de problemas que entrañan, en mayor o menor medida, formas tácitas de conocimiento contenidas en los procedimientos individuales y organizacionales" (Cimoli y Dosi, 1994:p. 670). Esto implica que el conocimiento tecnológico está comprendido en la prácticas y rutinas organizacionales de las firmas, las cuales, a su vez, se modifican en el tiempo debido al cambio en las estrategias y en las normas de comportamiento. De este modo, el concepto de capacidades tecnológicas no se limita al plano puramente técnico, sino que incluye el dominio de procedimientos y estructuras organizacionales así como el conocimiento de los patrones de comportamiento de ciertos agentes (por ejemplo, proveedores, clientes, trabajadores, etc.) (López y Lugones, 1996). Una empresa será competitiva si ha desarrollado estrategias y capacidades coherentes con los aspectos claves de éxito en sus mercados.

El desarrollo de capacidades tecnológicas y competitivas en las empresas depende en gran medida de la diferenciación de productos y ésta, a su vez, exige esfuerzos crecientes en I&D y en innovación tecnológica (además de otros aspectos denominados "activos complementarios" 7), campos en los que la brecha que separa a las empresas locales de aquéllas de países industrializados es cada vez más amplia, tanto en la esfera de la empresa como en lo que se refiere al ambiente y a las instituciones que conforman el Sistema Nacional de Innovación.

Dado que en el nuevo modelo de competencia el desempeño de las empresas y naciones está cada vez más íntimamente ligado a su capacidad tecnológica y de innovación, la habilidad de un país para mantener un rápido crecimiento económico en el largo plazo depende en gran medida de la efectividad con la cual sus instituciones y políticas apoyen la transformación tecnológica y la capacidad de innovación de sus empresas. El contar con una adecuada base de datos e información con respecto a las actividades tecnológicas de las empresas se convierte en un elemento fundamental que permite a las instituciones de apoyo realizar un diagnóstico de la situación, tendencias y perspectivas del potencial innovativo existente en las empresas, así como de cuáles son las áreas claves que requieren ser reforzadas a fin de desarrollar capacidades tecnológicas y competitivas sostenibles. Esta base de datos también constituye un aspecto clave para orientar la formulación de políticas públicas en materia de innovación y competitividad.

En este trabajo se presenta un diagnóstico del perfil competitivo de un conjunto de empresas que operan en un sector conexo a la industria petrolera venezolana -específicamente el sector productor de bienes-8, elaborado a través de la percepción de la gerencia acerca de su posición competitiva frente a empresas locales y empresas internacionales. Estos resultados cualitativos se refuerzan con el análisis cuantitativo a través de indicadores claves de producción (Esqueda y otros, 1996). Para el levantamiento de la información se realizaron entrevistas y encuestas a Gerentes y/o Presidentes de empresas proveedoras de la industria petrolera venezolana, pertenecientes a los sectores bienes, construcción y montaje, consultoría y servicios a pozos 9. La muestra de empresas pertenecientes al sector productor de bienes para la industria petrolera consta de cuarenta empresas, que, en el período 1993-1994 10, facturaron aproximadamente el 80 por ciento de las compras nacionales realizadas por PDVSA. Adicionalmente, tanto para el sector bienes como los demás sectores, se consideró la opinión de los usuarios de PDVSA y de las Asociaciones Empresariales.

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  1. Investigador. Master en Administración (1995), IESA; Ingeniero Industrial (1992) Universidad de Carabobo. bsanchez@iesa.edu.ve
  2. Investigadora. Master en Administración (1990), IESA; Master en Tecnología de Alimentos (1985) Universidad Central de Venezuela; Licenciada en Química (1981) Universidad Simón Bolívar. mcervill@iesa.edu.ve
  3. Profesor Coordinador del Centro de Producción e Innovación Tecnológica. PhD (1978), M.Sc. (1977) Universidad Estatal de Pennsylvania. Ingeniero Electrónico (1972), Politécnico del Norte de Londres. pesqueda@iesa.edu.ve
  4. Profesor Coordinador dela cátedra Gerencia de Producción Oscar Machado Zuloaga. PhD. en Administración de Empresas (1995), Universidad de Maryland; M.Sc. en Ciencias Gerenciales (1981), Cranfield Institute of Technology, Ingeniero Mecánico (1977) Universidad Simón Bolívar. adiaz@iesa.edu.ve
  5. En las economías emergentes el concepto de innovación requiere de una interpretación más amplia que incluye tanto innovaciones incrementales como radicales, pero que tiende a focalizarse en las primeras. Recientemente se ha argumentado que la competitividad basada en la innovación en el ámbito de la empresa es la que realmente contribuye al logro de una eficacia y una eficiencia sostenible a largo plazo.
  6. Para un estudio más exhaustivo sobre cómo determinar los calificadores y ganadores en un mercado, véase a Terry Hill en su libro Manufacturing Strategy (1993), pp 36-46
  7. Los analistas de los procesos de innovación coinciden en señalar que las firmas deben poseer ciertos activos complementarios que les permitan desarrollar y mejorar sus capacidades tecnológicas; por ejemplo: flexibilidad organizacional, recursos humanos calificados, servicios de apoyo, adecuada gestión de la información, etc. (López y Lugones, 1996)
  8. En el proyecto "Estudio de la competitividad de los sectores conexos nacionales de la industria petrolera" también se estudiaron los sectores: "construcción y montaje", "consultoría" y "servicio a pozos". (Ver Esqueda y otros, 1996)
  9. Este trabajo se basa en la información recabada en Estudio IESA - PDVSA (1995), sobre competitividad de los sectores conexos a la industria petrolera..
  10. A estas diferencias se les ha llamado brechas

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