ISSN 0798 1015

logo

Vol. 39 (Nº 49) Año 2018. Pág. 8

La gestión de las emociones, una necesidad en el contexto educativo y en la formación profesional

The management of emotions, a necessity in the educational context and in professional training

Mabel GARCÍA Echeverri 1; Paola Andrea HURTADO Olaya 2; Darley María QUINTERO Patiño 3; Diego Andrés RIVERA Porras 4; Yan Carlos UREÑA Villamizar 5

Recibido: 16/06/2018 • Aprobado: 25/07/2018 • Publicado 29/07/2018


Contenido

1. Introducción

2. Metodología

3. Resultados

4. Conclusiones

Referencias bibliográficas


RESUMEN:

La inteligencia emocional se define como la afectación que tiene una persona al relacionarse con distintos estímulos, estados o situaciones del entorno (López, 2015). Al relacionar la inteligencia emocional con el aprendizaje en el contexto educativo (Gorostiaga & Balluerka, 2014), se encuentra que las emociones, los estados de ánimo, las creencias y la motivación influyen en cómo se perciben las situaciones (Hernández, Ledesma, Olivas, Martínez & Escorza, 2016), y estas a su vez intervienen en el proceso de enseñanza - aprendizaje (Cejudo, López & Rubio, 2016). Este estudio busco describir la inteligencia emocional de los estudiantes de primer semestre de Psicología de una Universidad Privada. El método de investigación utilizado fue cuantitativo con diseño no experimental con alcance descriptivo y de corte transversal. Para recolectar la información se utilizó una ficha de datos sociodemográficos y la Escala Inteligencia Emocional propuesta por BarOn (1988) adaptada por Ugarriza (2003).
Palabras clave: Inteligencia emocional, contexto educativo, formación profesional.

ABSTRACT:

Emotional intelligence is defined as the affectation that a person has when relating to different stimuli, states or environmental situations (López, 2015). When relating emotional intelligence with learning in the educational context (Gorostiaga & Balluerka, 2014), it is found that emotions, moods, beliefs and motivation influence how situations are perceived (Hernández, Ledesma, Olivas, Martínez & Escorza, 2016), and these in turn intervene in the teaching - learning process (Cejudo, López & Rubio, 2016). This study aimed to describe the emotional intelligence of the first semester students of Psychology of a Private University. The research method used was quantitative with non-experimental design with descriptive and cross-sectional scope. To collect the information, a sociodemographic data sheet and the Emotional Intelligence Scale proposed by BarOn (1988) adapted by Ugarriza (2003) were used.
Keywords: Emotional intelligence, educational context, professional training.

PDF version

1. Introducción

La inteligencia emocional se define como la afectación que tiene una persona al relacionarse con distintos estímulos, estados o situaciones del entorno (López, 2015). Al relacionar la inteligencia emocional con el aprendizaje en el contexto educativo (Gorostiaga & Balluerka, 2014), se encuentra que las emociones, los estados de ánimo, las creencias y la motivación influyen en cómo se perciben las situaciones (Hernández, Ledesma, Olivas, Martínez & Escorza, 2016), y estas a su vez intervienen en el proceso de enseñanza - aprendizaje (Cejudo, López & Rubio, 2016). Diversos autores (Secanella, 2016; Fragoso, 2015; Azpiazu, Esnaola & Sarasa, 2015; Cazalla & Molero, 2014; Arias, 2014) relacionan la formación académica con la construcción del proyecto de vida, y resaltan la ética, el conocimiento, la praxis y la relación con los demás como aspectos esenciales en la formación integral de los futuros profesionales. Debido a que la educación no solo debe hacer énfasis en los conocimientos disciplinares (Páez & Castaño, 2015), sino que también debe aportar a la formación emocional (autoconocimiento, autocontrol, empatía, comunicación e interrelación).

Es importante reconocer que la inteligencia emocional interfiere en los procesos motivacionales, emocionales y cognitivos, ya que una persona emocionalmente inteligente es capaz de sentir (Arias, 2016), pero también puede regular las emociones, logrando estas no interfieran en la toma de decisiones de forma inmediata, lo cual facilita la resolución de problemas y la adaptación al medio (Villardón & Yániz, 2014). Por ende, los elementos emocionales implicados en los procesos de aprendizaje se relacionan con el control emocional, la planificación, la evaluación; y con el mantenimiento del esfuerzo necesario para la realización de las tareas (Aguilar, Gil, Pinto, Quijada & Zúñiga, 2014). Por último, se puede decir que las personas emocionalmente inteligentes gestionan mejor sus emociones (Elias, Tobias & Friedlander, 2014) y por consiguiente se relacionan una forma mejor en las dimensiones sociales, académicas y laborales, ya que presentan una mayor autoestima, ajuste emocional, bienestar y satisfacción, mientras que las personas emocionalmente menos inteligentes tienden a presentar comportamientos disruptivos, agresivos o violentos (Medrano & Trógolo, 2014).

1.1. Antecedentes

En el siguiente apartado, se citan investigaciones por su pertinencia y relación con el tema abordado en el presente estudio, teniendo como parámetro para la selección, la similitud de la población objeto de estudio y la variable. A continuación, se presenta una relación de estudios internacionales y nacionales de la variable Inteligencia Emocional:

En el 2015, Páez & Castaño realizaron un estudio titulado “Inteligencia emocional y rendimiento académico en estudiantes universitarios”. El estudio tuvo como objetivo describir la inteligencia emocional y determinar su relación con el rendimiento académico en estudiantes universitarios. Participaron 263 estudiantes, a quienes se les aplicaron diversos instrumentos, entre ellos el cuestionario EQ-i de BarOn para medir la inteligencia emocional. Se encontró un cociente de inteligencia emocional promedio de 46,51, sin diferencias según género, pero sí para cada programa: 62,9 para Economía; 55,69 en Medicina; 54,28 en Psicología y 36,58 para Derecho. Se encontró correlación entre el valor de IE y nota promedio hasta el momento (p = .019), mayor para Medicina (p = .001), seguido de Psicología (p = .066); no se encontró relación en los otros programas. Se presenta un modelo de dependencia cúbica entre coeficiente de inteligencia emocional y rendimiento académico significativo para el total de la población de Medicina y Psicología. Así mismo se encontró dependencia significativa de este coeficiente con programa (p = .000) y semestre (p = .000), aunque esta última presenta tendencia clara solo para Medicina. Los resultados coinciden con los de otros estudios que encuentran correlación entre inteligencia emocional y rendimiento académico.

También se consideró importante citar a Cassullo & García (2015) quienes realizaron un estudio acerca de “Las Competencias Socio Emocionales y su Relación con el Afrontamiento en Futuros Profesores de Nivel Medio”. Los autores profundizaron en el estudio de los aspectos psicosociales referidos a las competencias socioemocionales y consideraron las relaciones existentes con el afrontamiento. Este último es considerado como un importante recurso para afrontar la adversidad con éxito, integrarse a diferentes contextos educativos y responder a múltiples situaciones estresantes surgidas de la tarea misma, ya que los profesores se enfrentan a sucesos vitales estresantes que según la literatura se visualizan en la violencia, la exclusión social, la conflictividad familiar y la incapacidad de la escuela para compensar las carencias y desigualdades, entre otros.

Del mismo modo, se tuvo en cuenta a los autores Alonso, Rodríguez, Pérez & González en el 2016 quienes realizaron un estudio acerca de “La motivación e inteligencia emocional en estudiantes de Educación Secundaria Obligatoria”. Este estudio exploró el nivel motivacional y de inteligencia emocional de los estudiantes de Educación Secundaria Obligatoria, y la relación existente entre ambos componentes esenciales en la personalidad del individuo. Los autores trabajaron desde una metodología cuantitativa con una muestra de 500 alumnos de centros públicos de secundaria, y utilizaron el Cuestionario de Motivación y Estrategias de Aprendizaje (CMEA) y la versión en castellano de la Trait Meta-Mood Scale (TMMS-24). Los resultados encontrados indicaron un buen nivel motivacional en todos los factores (metas intrínsecas, valor de las tareas, creencia de control, autoeficacia para el rendimiento, ansiedad y metas extrínsecas), con una adecuada percepción, regulación y comprensión emocional. Así mismo, evidencian una correlación positiva y significativa de ambas, excepto entre el factor motivacional “ansiedad” y los factores “comprensión” y “regulación” que conforman la inteligencia emocional. En conclusión, tanto motivación como inteligencia emocional, son susceptibles de ser entrenadas y mejoradas en el ámbito educativo, con capacidad para poner en marcha las habilidades sociales y sacar el máximo rendimiento de cada adolescente.

Por otra parte, se tomó el estudio realizado por Bonilla, Moreno & Soler (2017) el cual se titula “El sentido y el significado atribuido a las emociones por el profesorado en formación de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia”. En el cual los autores hacen énfasis en que una educación de calidad no solo implica la formulación coherente de planes de estudio, sino que debe contemplar otros aspectos en la formación del profesorado, como las competencias emocionales, siendo un proceso que redundará en el mismo sistema educativo. Es así como este artículo presenta el sentido y el significado que los maestros en formación de la Facultad de Ciencias de la Educación en la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia les asignan a las emociones, como resultado de una investigación de tipo cualitativo que utilizó la metodología de estudio de caso y la técnica de entrevista a profundidad. Los participantes fueron nueve mujeres y ocho hombres de octavo o noveno semestre de 10 carreras universitarias de formación de maestros en distintas áreas. La investigación realizada puso de manifiesto que estos programas profesionales no integran de manera estructurada el estudio de las emociones y que el manejo emocional inadecuado puede tener un impacto negativo en el proceso educativo. De igual manera, resultó importante considerar la interdependencia entre lo intrapersonal e interpersonal y la relación entre los sentidos atribuidos a las emociones por parte de los participantes y los principales modelos de inteligencia emocional.

Finalmente, se citó a Fernández-Berrocal, Ruiz-Aranda, Salguero, Palomera & Extremera (2018) quienes realizaron un estudio titulado “La relación del Test de Inteligencia Emocional de la Fundación Botín (TIEFBA) con el ajuste personal y escolar de adolescentes españoles”. Este estudio analizó la relación del Test de Inteligencia Emocional de la Fundación Botín para Adolescentes (TIEFBA), una nueva medida de habilidad para evaluar la inteligencia emocional (IE), con el ajuste personal y escolar en adolescentes españoles. El instrumento, basado en el modelo de Mayer y Salovey (1997), evalúa las cuatro ramas mientras el participante está resolviendo tareas emocionales generadas por una situación emocional. El TIEFBA fue desarrollado de acuerdo con el paradigma del Test de Juicio Situacional y comprende ocho escenas diseñadas para evocar emociones positivas y negativas. Un total de 1684 adolescentes españoles (48.2% varones, edad media 14.37 años) completaron el TIEFBA. Se recogieron datos sobre personalidad, empatía, inteligencia y ajuste psicosocial. Los resultados proporcionan evidencia de la fiabilidad de los instrumentos y su validez factorial, convergente, discriminante y también alguna predictiva. Estos resultados sugieren que el TIEFBA es una nueva medida prometedora para evaluar la IE en los adolescentes españoles, lo que permitirá a los investigadores y educadores entender mejor cómo la IE afecta a los adolescentes, así como evaluar el impacto de las intervenciones en IE.

1.2. Bases teóricas

Con el objetivo de comprender los elementos conceptuales necesarios para la siguiente investigación se han definido dos variables en el marco que se desarrolla la propuesta investigativa estas son:

Inteligencia Emocional: Al realizar la revisión teórica se toma como base el modelo propuesto por BarOn (1988 citado por Ugarriza, 2003) el cual se compone por cinco dimensiones principales: intrapersonal, interpersonal, adaptabilidad, manejo del estrés y estado de ánimo general. A su vez, cada una de estas amplias dimensiones involucra un número de subcomponentes que son habilidades relacionadas, que han sido descritas y analizadas en el estudio de la inteligencia emocional de los adultos (Ugarriza & Pajares, 2005).

Dicho modelo (BarOn, 1988) resalta las siguientes dimensiones:

1. Escala intrapersonal: Incluye la medición de la autocomprensión de sí mismo, la habilidad para ser asertivo y la habilidad para visualizarse a sí mismo de manera positiva.

2. Escala interpersonal: Incluye destrezas como la empatía y la responsabilidad social, el mantenimiento de relaciones interpersonales satisfactorias, el saber escuchar y ser capaces de comprender y apreciar los sentimientos de los demás.

3. Escala de adaptabilidad: Incluye la habilidad para resolver los problemas y la prueba de la realidad, ser flexibles, realistas y efectivos en el manejo de los cambios y ser eficaces para enfrentar los problemas cotidianos.

4. Escala de manejo del estrés: Incluye la tolerancia al estrés y el control de los impulsos, ser por lo general calmado y trabajar bien bajo presión, ser rara vez impulsivo y responder a eventos estresantes sin desmoronarse emocionalmente.

5. Escala de estado de ánimo general: Incluye la felicidad y el optimismo, tienen una apreciación positiva sobre las cosas o eventos y es particularmente placentero estar con ellos.

Tabla 1
Modelo de la Inteligencia Emocional según BarOn (1988)

Dimensión

Componente

Intrapersonal

(CIA)

Área que reúne los siguientes componentes: comprensión emocional de sí mismo, asertividad, autoconcepto, autorrealización e independencia.

Comprensión emocional de sí mismo

(CM)

La habilidad para percatarse y comprender nuestros sentimientos y emociones, diferenciarlos y conocer el porqué de éstos.

Asertividad

(AS)

La habilidad para expresar sentimientos, creencias y pensamientos sin dañarlos sentimientos de los demás y defender nuestros derechos de una manera no destructiva.

Autoconcepto

(AC)

La habilidad para comprender, aceptar y respetarse a sí mismo, aceptando nuestros aspectos positivos y negativos, así como también nuestras limitaciones y posibilidades.

Autorrealización

(AR)

La habilidad para realizar lo que real-mente podemos, queremos y disfrutamos de hacerlo.

Independencia

(IN)

La habilidad para autodirigirse, sentirse seguro de sí mismo en nuestros pensamientos, acciones y ser independientes emocionalmente para tomar nuestras decisiones.

Interpersonal

(CIE)

Área que reúne los siguientes componentes: empatía, responsabilidad social y relación interpersonal.

Empatía

(EM)

La habilidad de percatarse, comprender y apreciar los sentimientos de los demás.

Relaciones interpersonales

(RI)

La habilidad para establecer y mantener relaciones mutuas satisfactorias que son caracterizadas por una cercanía emocional e intimidad.

Responsabilidad social

(RS)

La habilidad para demostrarse a sí mismo como una persona que coopera, contribuye y es un miembro constructivo del grupo social.

Adaptabilidad

(CAD)

Área que reúne los siguientes componentes: prueba de la realidad, flexibilidad y solución de problemas.

Solución de problemas

(SP)

La habilidad para identificar y definir los problemas como también para generar e implementar soluciones efectivas.

Prueba de la realidad

(PR)

La habilidad para evaluar la correspondencia entre lo que experimentamos (lo subjetivo) y lo que en la realidad existe (lo objetivo).

Flexibilidad

(FL)

La habilidad para realizar un ajuste adecuado de nuestras emociones, pensamientos y conductas a situaciones y condiciones cambiantes.

Manejo del Estrés

(CME)

Área que reúne los siguientes componentes: tolerancia al estrés y control de los impulsos.

Tolerancia al estrés

(TE)

La habilidad para soportar eventos adversos, situaciones estresantes y fuertes emociones sin “desmoronarse”, enfrentando activa y positivamente el estrés.

Control de los impulsos

(CI)

La habilidad para resistir o postergar un impulso o tentaciones para actuar y controlar nuestras emociones.

Estado de Ánimo en General

(CAG)

Área que reúne los siguientes componentes: felicidad y optimismo.

Felicidad

(FE)

La habilidad para sentirse satisfecho con nuestra vida, para disfrutar de sí mismo y de otros y para divertirse y expresar sentimientos positivos.

Optimismo

(OP)

La habilidad para ver el aspecto más brillante de la vida y mantener una actitud positiva, a pesar de la adversidad y los sentimientos negativos.

Fuente: Tomado y adaptado de Ugarriza (2001).

2. Metodología

Este estudio se realizó siguiendo la metodología propuesta por Hernández, Fernández & Baptista (2010) con un paradigma positivista - cuantitativo de diseño no experimental con alcance descriptivo y corte transversal. Los instrumentos se aplicaron a 134 estudiantes de psicología de primer semestre de una universidad privada. No se calculó muestreo debido al tamaño de la población, en vez de eso se tomaron todos los elementos de la misma y se utilizó la estadística aplicada para el análisis de los datos de manera científica (Rivero, 2013).

2.1. Instrumentos

Para recolectar los datos demográficos se utilizó una ficha de caracterización que incluyo las variables de género, edad, formación académica y vinculación laboral actual, mientras que para la evaluación de la inteligencia emocional se utilizó la Escala Inteligencia Emocional BarOn (I-CE) adaptada por Ugarriza en el 2001, debido a que dicho instrumento se puede aplicar de forma individual o colectiva con un tiempo aproximado de 20 a 25 minutos, aproximadamente. La escala consta de 133 ítems en formato tipo Likert de cuatro puntos agrupados en 5 variables, en la cual los evaluados responden a cada ítem según las opciones de respuestas: “muy rara vez”, “rara vez”, “a menudo” y “muy a menudo” (ver Tabla 1. Sistema de Variables). Los puntajes altos indican niveles elevados de inteligencia emocional y social (Ugarriza, 2003).

2.2. Sistema de Variables

Tabla 2
Sistema de Variables

Instrumento

Variable

Medición

Tipo

Dimensión

Datos Demográficos

Género

Cualitativa

Nominal

Masculino

Femenino

Edad

Cuantitativa

Intervalo

Menor de 18 años

18 a 25 años

26 a 50 años

51 a 65 años

Más de 65 años

Formación académica

Cualitativa

Ordinal

Primaria

Secundaria

Técnica y/o Tecnológica

Pregrado

Postgrado

Vinculación Laboral Actual

Cualitativa

Nominal

Si

No

Escala Inteligencia Emocional BarOn (I-CE) (Ugarriza, 2001).

Intrapersonal

Cuantitativa

Intervalo

3, 6, 7, 9, 11, 19, 21, 22, 23, 24, 32, 35, 36, 37, 40, 48, 51, 52, 56, 63, 66, 67, 70, 81, 82, 85, 88, 92, 95, 96, 100, 107, 110, 111, 114, 116, 121, 125, 126 y 129.

Interpersonal

Cuantitativa

Intervalo

10, 16, 18, 20, 30, 31, 39, 44, 46, 50, 55, 60, 61, 62, 69, 71, 72, 76, 84, 90, 98, 99, 104, 113, 119, 124 y 128.

Adaptabilidad

Cuantitativa

Intervalo

1, 14, 15, 28, 29, 34, 38, 43, 45, 53, 58, 59, 68, 74, 75, 83, 86, 87, 89, 97, 103, 112, 118, 127 y 131.

Manejo del Estrés

Cuantitativa

Intervalo

4, 13, 25, 27, 33, 42, 49, 57, 64, 73, 78, 80, 93, 102, 108, 109, 115, 122 y 130.

Estado de Ánimo General

Cuantitativa

Intervalo

2, 5, 8, 12, 17, 26, 41, 47, 54, 65, 77, 79, 91, 94, 101, 105, 106, 117, 120, 123 y 132.

Fuente: Elaboración propia

3. Resultados

A continuación, se presentan los resultados obtenidos del análisis, describiendo las características de la información recolectada.

3.1. Características Sociodemográficas

Tabla 3
Género

Género

Frecuencia

Porcentaje

Masculino

11

8

Femenino

123

92

Total

134

100

Fuente: Elaboración propia

Según la Tabla 3 se puede identificar que de las 134 personas (100%), 123 son de Género Femenino (92%) y 11 son de Género Masculino (8%), esto indica que las mujeres se inclinan más hacia el estudio de la psicología, en comparación con los hombres.

Tabla 4
Edad

Edad

Frecuencia

Porcentaje

Menor de 18 años

26

19

18 a 25 años

69

51

26 a 50 años

39

29

Total

134

100

Fuente: Elaboración propia

Según la Tabla 4 se puede identificar que el 51% (69 personas) tienen una edad comprendida entre los 18 y los 25 años, el 29% (39 personas) tienen una edad comprendida entre los 26 y 50 años, y el 19% (26 personas) tienen una edad inferior a los 18 años. Esto indica que los adultos jóvenes e intermedios buscan realizar estudios en el área de la psicología.

Tabla 5
Formación académica

Formación académica

Frecuencia

Porcentaje

Secundaria

31

23

Técnica y/o Tecnológica

67

50

Pregrado

36

27

Total

134

100

Fuente: Elaboración propia

Según la Tabla 5 se evidencia que el 50% (67 personas) poseen estudios técnicos y/o tecnológicos, el 27% (36 personas) estudios de pregrado y el 23% (31 personas) estudios secundarios. Lo anterior, permite inferir que las personas que estudian psicología cuentan con estudios de nivel superior y buscan mejorar su perfil académico cualificando su formación profesional.

Tabla 6
Vinculación Laboral Actual

Vinculación Laboral Actual

Frecuencia

Porcentaje

Si

62

46

No

72

54

Total

134

100

Fuente: Elaboración propia

Según la Tabla 6 se puede identificar que el 54% (72 personas) no se encuentran vinculadas laboralmente, mientras que el 46% (62 personas) si lo están. Esto indica que las fuentes con las que cancelan el valor del estudio provienen de otros ingresos, personas y/o créditos. No obstante, una proporción significativa de estudiantes cuentan con la estabilidad económica para iniciar su proceso de profesionalización.

3.2. Resultados Escala Inteligencia Emocional

Tabla 7
Inteligencia Emocional Componente Intrapersonal

Intrapersonal

Frecuencia

Porcentaje

Bajo

74

55

Moderado

56

42

Alto

4

3

Total

134

100

Fuente: Elaboración propia

Según la Tabla 7 se puede identificar mayor puntuación entre los rangos bajo y moderado en el Componente Intrapersonal de la Inteligencia Emocional. Los puntajes bajos en este componente indican dificultades en la autocomprensión, la asertividad y la visualización de sí mismo de manera positiva; aspectos que son fundamentales en el desarrollo humano, por lo cual se hace evidente la gestión de las emociones en contextos educativos.

Tabla 8
Inteligencia Emocional Componente Interpersonal

Interpersonal

Frecuencia

Porcentaje

Bajo

33

25

Moderado

97

72

Alto

4

3

Total

134

100

Fuente: Elaboración propia

Según la Tabla 8 se puede identificar mayor puntuación entre los rangos moderado y bajo en el Componente Interpersonal de la Inteligencia Emocional. Los puntajes moderados en este componente indican una regulación en la empatía, la responsabilidad social, el mantenimiento de relaciones interpersonales satisfactorias, el saber escuchar, el ser capaces de comprender y apreciar los sentimientos de los demás.

Tabla 9
Inteligencia Emocional Componente Adaptabilidad

Adaptabilidad

Frecuencia

Porcentaje

Bajo

78

58

Moderado

52

39

Alto

4

3

Total

134

100

Fuente: Elaboración propia

Según la Tabla 9 se puede identificar mayor puntuación entre los rangos bajo y moderado en el Componente de Adaptabilidad de la Inteligencia Emocional. Los puntajes bajos en este componente indican dificultades para resolver los problemas, ser flexibles, realistas y efectivos en el manejo de los cambios, y la resolución de los problemas cotidianos.

Tabla 10
Inteligencia Emocional Componente Manejo del Estrés

Manejo del Estrés

Frecuencia

Porcentaje

Bajo

114

85

Moderado

16

12

Alto

4

3

Total

134

100

Fuente: Elaboración propia

Según la Tabla 10 se puede identificar mayor puntuación entre los rangos bajo y moderado en el Componente de Manejo del Estrés de la Inteligencia Emocional. Los puntajes bajos en este componente indican baja tolerancia al estrés y el control de los impulsos, y dificultades para mantener la calma en situaciones de presión, sin generar un compromiso y/o afectación emocional, ello puede influir en el logro de los objetivos académicos, por lo que el trabajo y gestión de emociones en la formación profesional es fundamental.

Tabla 11
Inteligencia Emocional Componente Estado de Ánimo General

Estado de Ánimo General

Frecuencia

Porcentaje

Bajo

81

60

Moderado

45

34

Alto

8

6

Total

134

100

Fuente: Elaboración propia

Según la Tabla 11 se puede identificar mayor puntuación entre los rangos bajo y moderado en el Componente del Estado de Ánimo General de la Inteligencia Emocional. Los puntajes bajos en este componente indican dificultades en la percepción de la felicidad y del optimismo, interpretando negativamente los eventos cotidianos que pueden ser placenteros.

4. Conclusiones

En conclusión, el estudio permitió identificar diferentes aspectos asociados a la formación profesional en psicología; uno de ellos, que las mujeres se inclinan más hacia el estudio de la psicología en comparación con los hombres, teniendo en cuenta que del 100% de la población objeto de estudio, el 93% son mujeres. Así mismo, la población que elige realizar estudios de psicología corresponde a los adultos jóvenes e intermedios con un 70%; y un 77% de la población ya cuenta estudios de nivel superior, con lo que se puede inferir que buscan mejorar su perfil académico y/o continuar con su formación profesional, esto permite a su vez, relacionar el 46% de la población, la cual se encuentra vinculada en ámbitos laborales, permitiendo estabilidad económica para continuar sus estudios con respecto al 54% que no lo está.

En cuanto a los componentes de la inteligencia emocional se puede concluir que, en los componentes intrapersonal, adaptabilidad, manejo de estrés y estado de ánimo en general, se evidencian puntuaciones en rango bajo y moderado, indicando dificultades en aspectos como la autocomprensión, la asertividad y la visualización de sí mismo de manera positiva, así como en la resolución de problemas, la flexibilidad y el manejo de los cambios. De igual manera, se puede inferir baja tolerancia al estrés y control de impulsos, y dificultades para mantener la calma en situaciones de presión, así como en la percepción de la felicidad y el optimismo, aspectos que deben tenerse en cuenta y fortalecerse pues son una necesidad clara en la formación profesional. Sin embargo, en el componente interpersonal, se evidencia puntuación entre rangos moderado y bajo, indicando regulación en la empatía, la responsabilidad social, escucha, comprensión del otro, lo cual evidencia relaciones interpersonales satisfactorias, aspecto fundamental en el ejercicio profesional del psicólogo.

Referencias bibliográficas

Aguilar Rivera, M. C., Gil Llanes, O. F., Pinto Garrido, V. A., Quijada Maldonado, C. R. & Zúñiga Sánchez, C. A. (2014). Inteligencia emocional, estrés, autoeficacia, locus de control y rendimiento académico en universitarios. Enseñanza e investigación en psicología, 19(1).

Alonso, J. D., Rodríguez, V. D., Pérez, M. E. & González, M. D. M. R. (2016). Motivación e inteligencia emocional en estudiantes de Educación Secundaria Obligatoria. Revista de estudios e investigación en psicología y educación, 3(2), 94-101.

Arias, W. (2016). Inteligencia emocional y estrategias metacognitivas en estudiantes de psicología de una universidad privada de Arequipa. Acta psicológica peruana, 1(2), 353-378.

Arias, W. L. (2014). Estilos de aprendizaje e inteligencia en estudiantes universitarios de Arequipa, Perú. Journal of Learning Styles, 7(14).

Azpiazu, L., Esnaola, I. & Sarasa, M. (2015). Capacidad predictiva del apoyo social en la inteligencia emocional de adolescentes. European journal of education and psychology, 8(1), 23-29.

BarOn, R. (1988). The development of a concept of psychological well-being. Disertación doctoral inédita. Grahamstown. Sudáfrica: Rhodes University.

Bonilla, R. E., Moreno, A. K. & Soler, R. N. (2017). El sentido y el significado atribuido a las emociones por el profesorado en formación de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia he sense and meaning attributed to emotions by teachers training at Pedagogical and Technological University of Colombia. Contextos educativos: Revista de educación, (20), 77-93.

Cassullo, G. L. & García, L. (2015). Estudio de las Competencias Socio Emocionales y su Relación con el Afrontamiento en Futuros Profesores de Nivel Medio. Revista Electrónica Interuniversitaria de Formación del Profesorado, 18(1), 213-228.

Cazalla-Luna, N. & Molero, D. (2014). Inteligencia emocional percibida, ansiedad y afectos en estudiantes universitarios. Revista Española de Orientación y Psicopedagogía, 25(3).

Cejudo, J., López-Delgado, M. L. & Rubio, M. J. (2016). Inteligencia emocional y resiliencia: Su influencia en la satisfacción con la vida en estudiantes universitarios. Anuario de Psicología, 46(2), 51-57.

Elias, M. J., Tobias, S. E. & Friedlander, B. S. (2014). Educar con inteligencia emocional: Cómo conseguir que nuestros hijos hijos sean sociables, felices y responsables. Debols! llo.

Fernández-Berrocal, P., Ruiz-Aranda, D., Salguero, J. M., Palomera, R. & Extremera, N. (2018). La relación del Test de Inteligencia Emocional de la Fundación Botín (TIEFBA) con el ajuste personal y escolar de adolescentes españoles. Revista de Psicodidáctica, 23(1), 1-8.

Fragoso-Luzuriaga, R. (2015). Inteligencia emocional y competencias emocionales en educación superior,¿ un mismo concepto?. Revista iberoamericana de educación superior, 6(16), 110-125.

Gorostiaga, A. & Balluerka, N. (2014). Evaluación de la empatía en el ámbito educativo y su relación con la inteligencia emocional. Ministerio de Educación.

Hernández, A. K., Ledesma, L. E., Olivas, O. L., Martínez, S. E. & Escorza, M. A. Q. (2016). Análisis de la relación entre el estilo de vida y la inteligencia emocional en estudiantes universitarios. Ciencia y Humanismo en la Salud, 3(1), 14-23.

López-Fernández, C. (2015). Inteligencia emocional y relaciones interpersonales en los estudiantes de enfermería. Educación médica, 16(1), 83-92.

Medrano, L. A. & Trógolo, M. (2014). Validación de la escala de dificultades en la regulación emocional en la población universitaria de Córdoba, Argentina. Universitas Psychologica, 13(4).

Hernández, Fernández & Baptista (2014). Metodología de la investigación. Sexta Edición.

Páez Cala, M. L. & Castaño Castrillón, J. J. (2015). Inteligencia emocional y rendimiento académico en estudiantes universitarios. Psicología desde el Caribe, 32(2).

Rivero, D. (2013). Metodología de la investigación.

Secanella, J. (2016). Nuevas competencias para la empleabilidad de los estudiantes universitarios. La cuestión universitaria, (7), 40-47.

Ugarriza Chávez, N. & Pajares Del Águila, L. (2005). La evaluación de la inteligencia emocional a través del inventario de BarOn ICE: NA, en una muestra de niños y adolescentes. Persona, (8), 11-58.

Ugarriza, N. (2001). La evaluación de la inteligencia emocional a través del inventario de BarOn (I-CE) en una muestra de Lima Metropolitana. Persona, (4), 129-160.

Ugarriza, N. (2003). La evaluación de la inteligencia emocional a través del Inventario de BarOn (I-CE) en una muestra de Lima Metropolitana, 2.a edición. Lima: Ediciones Libro Amigo.

Villardón-Gallego, L. & Yániz, C. (2014). Características psicométricas de la Escala de Estrategias Afectivas en el proceso de aprendizaje (EEAA). Electronic Journal of Research in Educational Psychology, 12(3), 693-716.


1. Psicóloga - Universidad de Santander. Magíster en Psicología - Universidad del Norte. Especialista en Psicología Clínica - Universidad del Norte. Coordinadora del Programa de Psicología. Corporación Universitaria Minuto de Dios, Cúcuta, Colombia. Email: mabel.garcia@uniminuto.edu. ORCID: https://orcid.org/0000-0002-3624-0992

2. Psicóloga - Universidad Antonio Nariño. Magíster en Neuropsicología y Educación - Universidad Internacional de la Rioja. Especialista en Neuropsicología Infantil - Pontificia Universidad Javeriana. Corporación Universitaria Minuto de Dios, Cúcuta, Colombia. Email: paola.hurtado@uniminuto.edu.co. ORCID: https://orcid.org/0000-0002-5580-7149

3. Psicóloga - Universidad de Pamplona. Especialista en Práctica Pedagógica Universitaria - Universidad Francisco de Paula Santander. Magíster en Psicopedagogía - Universidad Internacional de la Rioja. Corporación Universitaria Minuto de Dios, Cúcuta, Colombia. Email: dquinteropa@uniminuto.edu.co. ORCID: https://orcid.org/0000-0002-1281-3813

4. Psicólogo - Universidad de Pamplona. Magíster en Gerencia de Recursos Humanos - Universidad Internacional Iberoamericana de Puerto Rico. Especialista en Gerencia en Riesgos Laborales, Seguridad y Salud en el Trabajo - Corporación Universitaria Minuto de Dios. Especialista en Estadística Aplicada - Universidad Francisco de Paula Santander. Corporación Universitaria Minuto de Dios, Cúcuta, Colombia. Email: driveraporr@uniminuto.edu.co. ORCID: https://orcid.org/0000-0003-2169-3208

5. Psicólogo - Universidad de Pamplona. Postdoctor en Ciencia Humanas - Universidad del Zulia. Doctor en Ciencias Mención Gerencia - Universidad Privada Dr. Rafael Belloso Chacín. Magíster en Gerencia de Proyectos de Investigación y Desarrollo - Universidad Privada Dr. Rafael Belloso Chacín. Corporación Universitaria Minuto de Dios, Cúcuta, Colombia. Email: yan.urena@uniminuto.edu. ORCID: https://orcid.org/0000-0002-9970-159X


Revista ESPACIOS. ISSN 0798 1015
Vol. 39 (Nº 49) Año 2018

[Índice]

[En caso de encontrar algún error en este website favor enviar email a webmaster]

revistaespacios.com