Alexis Mercado
Hemos señalado que nuestro parque industrial presenta una infraestructura de control de contaminación deficiente. Por otra parte, la situación de crisis económica severa que se confronta atenta seriamente contra las posibilidades de que las empresas se sensibilicen por este problema. Para completar esta situación desfavorable, tenemos que el papel que han venido desempeñando los gobiernos en la problemática ambiental es muy vago, problema que se ha visto intensificado por un debilitamiento de los principales organismos encargados de velar por la protección ambiental 13.
Adicionalmente, se identifican otra serie de elementos tecnoeconómicos que dificultan la introducción de prácticas de gestión ambiental los cuales se discuten a continuación.
Ya se vio que el tamaño de las empresas puede constituir una limitante a las posibilidades de insertarse dentro de la práctica de gestión ambiental. Como se sabe, la gran mayoría de las firmas del país son medianas y pequeñas. Prueba de ello es que para el año de 1991 de un total de 10.539 empresas censadas, solo 979, es decir ¡menos del 10 %!, estaban consideradas dentro de la categoría da gran industria (con volumen de empleo superior a 100 personas, ver encuesta industrial 1992) 14.
Esto plantea la necesidad de un abordaje especial del problema ya que, si bien desde el punto de vista de generación de residuos e impacto ambiental, la carga individual de las empresas pudiera resultar pequeña, el gran número de ellas puede generar y de hecho ocasiona, problemas serios de contaminación. El problema se torna aun más grave porque, la mayoría de las veces, se presenta gran dificultad para el monitoreo y la realización de auditorías de estos desechos.
La gravedad del problema puede ilustrarse con el ejemplo de los residuos sólidos. Si bien de acuerdo a las leyes internacionales el manejo de los mismos es una responsabilidad que compete a las fuentes generadoras, en el caso venezolano el destino final de esos residuos constituye un problema muy serio, ya que la gran mayoría de las empresas no realizan tratamiento alguno; procediendo simplemente a depositarlos o en el peor de los casos descargarlos en rellenos sanitarios suburbanos 15.
Como es bien conocido, las empresas en los últimos años se han desempeñado en una situación de alta incertidumbre. En medio de esta circunstancia un gran porcentaje de ellas han adoptado, antes que nada, estrategias de sobrevivencia en el corto plazo. Ahora bien, si a este factor se le suma el anterior (el pequeño tamaño de la firma, el cual dificulta destinar fondos para protección ambiental), puede suponerse que resulte sumamente difícil que las empresas puedan prestarle alguna al problema en la actualidad. Por si fuera poco, en la nueva ley de impuesto sobre la renta se eliminan los incentivos fiscales a los proyectos de protección al ambiente.
Por esta razón, se considera que la implantación de regulaciones ambientales podrían actuar en el sentido de comprometer, aun más, la ya precaria situación económica de las firmas, por no hablar de su situación competitiva y, en consecuencia, podrían operar en forma contraproducente. Se debe entonces pensar en el diseño de instrumentos de políticas y estrategias que le permitan a las empresas involucrarse en estas nuevas trayectorias sin afectar en forma considerable su estabilidad. la experiencia de los países del sudeste asiático, ofrece una serie de opciones que valdrían la pena ser estudiadas.
Otro aspecto que constituye un limitante de la efectividad de las herramientas de intervención se relaciona con la no consideración de las especificidades tecnológicas de las ramas o subsectores industriales y el desconocimiento del verdadero potencial innovativo que los mismos presentan. En consecuencia, es necesario conocer de forma amplia estos aspectos.
Un aspecto importante en la definición de una metodología para abordar el problema de gestión ambiental lo constituye el enfoque desde una perspectiva sectorial. El sentido común dice que hay industrias que son más contaminantes que otras, lo cual indica que es necesario un tratamiento diferenciado. Ahora bien, en lo atinente a las posibilidades de insertarse dentro de las nuevas trayectorias innovativas, el problema se relaciona con los patrones de diversificación tecnológica de las ramas o sectores. Si bien los problemas de contaminación de algunos sectores pueden ser resueltos en buena medida a través de la incorporación de tecnologías de "remediación", en otros, por el contrario, resulta muy difícil. Para estos últimos, las estrategias innovativas se deben orientar más hacia el desarrollo de tecnologías y/o la introducción de innovaciones que desde la concepción misma del proceso aminoren el impacto ambiental.
Por esta razón, se introducen algunos criterios de clasificación para la industria. En primer lugar se hace distinción entre industrias de procesos e industria de manufactura, y a partir de esta primera gran división se introducen algunas subclasificaciones (esquema 3). La diferencia entre manufactura y procesos se realiza en función del potencial contaminante que presentan estos dos tipos de industrias. Luego las subclasificaciones obedecen a criterios relacionados con las particularidades de los procesos de diversificación tecnológica de las ramas y/o sectores y, por último, de su potencial de exportación.
Por esta razón es necesario, caracterizar la situación tecnológica de los diferentes sectores de la industria. Hay que establecer en forma precisa sus mecanismos de aprendizaje y los condicionantes del mismo para poder estimar las vías más convenientes para incorporar la variable ambiental dentro de la gestión empresarial.
Estos estudios implican la movilización de una cantidad importante de recursos. A partir de estas caracterizaciones se pueden comenzar a diseñar los instrumentos de política y esbozar las estrategias para su implantación. Surge así otro problema: el del financiamiento de esta reconversión.
13.El Ministerio del Ambiente, fue el primero creado en la región. Este llego a conformar cuadros técnicos de alto nivel. En los últimos años, sin embargo, se ha verificado un debilitamiento del mismo, eliminándose inclusive dependencias importantes como sería el caso del laboratorio de calidad ambiental.
14. No hacemos consideración explícita de los demás estratos presentes en la encuesta industrial, ya que firmas con volumen inferior a quinientos trabajadores son consideradas a nivel internacional como pequeñas o medianas empresas.
15. En fecha reciente, se acaba de presentar al ejecutivo las normas para el control y generación manejo de residuos peligrosos.